Vino de calidad: factores y características

Publicado el: 27 de octubre, 2020

Guía para reconocer un buen vino

 La calidad es el atributo más importante en un vino. A diferencia de otras características que involucran plenamente a la subjetividad de quien lo bebe (no solo el gusto personal sino también los recuerdos y emociones que un vino evoca), el concepto de calidad es puramente objetivo. 

En el caso particular de la vitivinicultura, la calidad de un ejemplar involucra un sinfín de factores relacionados con la elaboración: desde la finca hasta la guarda.  

 ¿Cuándo se considera que un vino es de calidad?

Los argentinos amantes del vino corren con una ventaja trascendental: en nuestro país, la mayor parte de los vinos finos que se elaboran son de buena calidad. Actualmente, siempre y cuando el consumidor se incline por un ejemplar de una bodega reconocida, es muy difícil encontrar vinos “malos” nacidos a partir de uvas de los terruños nacionales.

En líneas generales, en todo ejemplar de calidad se percibe una armonía general. Cada una de sus aristas tiene que dar una sensación de redondez y equilibrio al beberlo que invita a servirse una copa más.

Características de los vinos de calidad

Degustar un vino es la mejor forma de conocer su calidad. Hay que tener en cuenta que la cata se compone de tres fases fundamentales basadas en los sentidos que intervienen en la degustación: vista, olfato y gusto. También participa de esta experiencia sensorial el tacto ya que, a través de él, la lengua nos brinda información sobre la textura, la temperatura y las burbujas –en el caso de los espumantes- de la etiqueta en cuestión.

En general, los parámetros de calidad en los vinos tintos, blancos, dulces y espumantes son los siguientes:

  • Vinos tintos de calidad: Son ejemplares puros, con aromas frutados limpios, sabores definidos y sentido de terruño.
  • Vinos blancos de calidad: Son vinos de gran fineza, equilibrio y elegancia. Ejemplares limpios, frutados y con definición varietal.
  • Vinos dulces de calidad: A pesar de ser vinos de cosecha tardía, estos ejemplares no deben empalagar al beberlos. Es fundamental que tengan una buena acidez, ya que esta es la encargada de otorgarle frescura. De lo contrario, se percibirá muy goloso y denso en el paladar.
  • Espumantes de calidad: Un espumante de calidad siempre tiene que presentar una efervescencia fina (refrescante y agradable pero no excesiva), con burbujas pequeñas y en columnas bien definidas, y una espuma persistente.

¿Qué factores inciden en la calidad del vino?

Hay incontables factores que inciden en la calidad de un vino. Entre ellos, los más importantes son:

  • Materia prima: Últimamente, es cada vez más usual escuchar la frase “el vino nace en la finca”. Es cierto, los viñedos equilibrados que otorgan frutos sanos cosechados en su punto justo de madurez son un pilar determinante para lograr un vino de calidad. Es simple: sin grandes uvas no hay grandes vinos.
  • Tecnología: La vitivinicultura es una actividad humana que combina naturaleza y técnica. La tecnología de punta nos permite potenciar y conservar todo lo que la finca nos brinda. Por lo tanto, el equipamiento técnico de una bodega es sumamente importante al momento de elaborar vinos de la más alta calidad. 
  • Vasijas: La calidad del material con el que están confeccionadas las vasijas en las que los vinos fermentan y se crían (acero inoxidable, concreto y roble, entre otros) también es trascendental en el resultado del producto final.
  • Tiempo: El tiempo es un factor intangible pero tan importante como los anteriores. Tal es así, que el precio de un vino suele estar íntimamente relacionado con el tiempo implicado en su elaboración. Un vino de calidad necesita meses o incluso años antes de ser lanzado al mercado para ganar elegancia, armonía y redondez, tanto durante la crianza como durante la estiba en la cava de la bodega.

    • ¿Cómo se relaciona el precio con la calidad de un vino?

    Si bien el precio del vino no está directamente relacionado a la calidad, hay otros factores que sí lo están, como el cuidado de las vides y las uvas, un menor rendimiento de las plantas, el tipo de vinificación elegida, la crianza en barricas nuevas y cómo ha sido guardado en la bodega. 

    ¿Un vino caro siempre es de buena calidad?

    Si bien un precio alto no determina directamente la calidad del vino, el valor sí va a estar íntimamente relacionado con los insumos y el tiempo dedicado a su elaboración: los vinos más caros suelen ser aquellos que pasan largos meses en barricas y estibados en la bodega. 

    ¿Existen niveles de calidad de los vinos? 

    En el mundo del vino conviven distintos estilos y también distintos niveles de calidad. Los vinos a granel, que luego llegan a la mesa en forma de tetrabrik, damajuana o bag in box; los llamados vinos de mesa; los varietales jóvenes; los vinos de reserva; los ejemplares Premium y finalmente los vinos de alta gama. 

    ¿Dónde comprar un vino de calidad?

    Las vinotecas son la mejor opción para comprar vinos de calidad ya que cuentan con profesionales capacitados para asesorar a los consumidores en la elección de la etiqueta acorde a la situación, la comida o la persona que se quiera agasajar.

    Del mismo modo, las tiendas online de las bodegas cuentan con toda la información sobre su portfolio de etiquetas (variedades, añada, elaboración, crianza) para poder comprar un vino de la más alta calidad.