Artículo: ¿Un whiskey irlandés afinado en barricas de Malbec? Llegó un hito que une dos mundos

¿Un whiskey irlandés afinado en barricas de Malbec? Llegó un hito que une dos mundos
Argentina es mundialmente reconocida por su tradición vitivinícola. Somos un país orgulloso de nuestros vinos y de un territorio que ha sabido dar vida a algunos de los mejores Malbec del mundo. Sin embargo, en paralelo, existe otra pasión profundamente arraigada en nuestra cultura: el whisky. Una herencia de la inmigración anglosajona que, con el paso del tiempo, se convirtió en un ritual, en un gusto adquirido y, hoy, en un mercado en plena expansión.
En este cruce de mundos, y fieles a nuestro espíritu innovador, en Bodegas Bianchi celebramos un hito histórico: presentamos nuestro primer whiskey, creado en conjunto con The Temple Bar Whiskey Company, con sede en Dublín. Se trata de una edición limitada que une con maestría dos tradiciones: la suavidad del whiskey irlandés y la intensidad del Malbec mendocino.
Nuestra impronta familiar se fusiona así con la experiencia de Tom Cleary, actual propietario del icónico pub The Temple Bar, quien conserva la antigua práctica de mezclar y embotellar whiskey en el propio lugar, legado que hoy se mantiene vivo en este proyecto.
El resultado es un Single Malt de 18 años que pasó quince años en barricas de bourbon y finalizó su maduración con tres años en barricas de Enzo Bianchi Malbec, nuestro vino insignia. Ese último paso lo convierte en un destilado excepcional, donde la herencia irlandesa se encuentra con la identidad vitivinícola argentina para dar vida a un producto único, sofisticado y lleno de carácter.
Tal como explica nuestro Chief Winemaker, Silvio Alberto, el paso por barricas de Enzo Bianchi Malbec aporta mayor complejidad, estructura y una personalidad sensorial irrepetible. El whiskey se presenta con un color ámbar intenso, aromas a frutas maduras con sutiles toques de roble y especias, y un paladar que combina armoniosamente la suavidad del whiskey irlandés con la riqueza frutal y el cuerpo del Malbec mendocino. Su final es largo, redondo y distintivo, con una graduación alcohólica de 43°.
Este lanzamiento llega en un momento clave para la categoría. En los últimos años, el consumo de whisky en Argentina experimentó un desarrollo extraordinario. Según estimaciones del Museo del Whisky, desde el año 2000 el consumo creció cerca de un 6.000 %. Sólo en 2020 se vendieron más de 11 millones de litros, un 1,5 % más que el año anterior. Al mismo tiempo, el mercado comenzó a diversificarse: el consumidor, antes centrado en las etiquetas blend tradicionales, ahora se inclina cada vez más por los whiskies de malta, productos premium y propuestas con historias diferenciadoras. De hecho, los segmentos premium, super premium y ultra prestige representan alrededor del 12 % del volumen, pero concentran el mayor valor y proyectan un crecimiento cercano al 52 % en los próximos tres años.
En este contexto, The Temple Bar Whiskey Finished in Enzo Bianchi Malbec Casks se presenta como una novedad que dialoga con las nuevas expectativas del consumidor argentino y global, cada vez más abierto a explorar experiencias distintas, influencias cruzadas y productos de alto valor sensorial y conceptual.
Fieles a nuestro trabajo artesanal, presentamos solo 900 botellas de 700 ml, una partida súper limitada que llega al mercado con un precio sugerido de $300.000. Es una propuesta pensada para quienes buscan rarezas, ediciones especiales y destilados que cuentan una historia.
Con este lanzamiento que se suma a la incorporación reciente de nuestro vermut Fasano y nuestro gin Goat continuamos escribiendo nuevos capítulos en la historia de Bodegas Bianchi. Un camino donde tradición e innovación conviven, donde honramos nuestro legado y, al mismo tiempo, nos permitimos explorar nuevas categorías y expandir nuestros horizontes.

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