Comparación entre vinos del Nuevo y Viejo Mundo

Conocé las diferencias, similitudes y características de los vinos del nuevo y viejo mundo

Los conocedores del vino están familiarizados con las dos máximas categorías en las que se dividen los ejemplares del mundo: los vinos del Viejo Mundo y los del Nuevo Mundo. Esta división se usa para separar a las etiquetas de acuerdo al lugar del planeta en el que se originan, a la tradición vitivinícola propia de esa región productiva y a los métodos utilizados para su elaboración. 

¿Qué se entiende por vino del Viejo Mundo o vino del Nuevo Mundo?

Los vinos del Viejo Mundo son aquellos vinos elaborados en los terruños europeos que poseen una larga historia de producción enológica documentada. Sus raíces culturales se remontan a los tiempos del Imperio Romano (27 a.C. – 476 d.C.), cuando se desarrollaron las primeras técnicas de producción, almacenamiento y distribución de vino en Europa. 

En contraposición, se denomina vinos del Nuevo Mundo a aquellos ejemplares procedentes de otras regiones por fuera del continente europeo, como Argentina, Chile, Estados Unidos, México, Perú, Uruguay, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. En la mayor parte de los casos, por la influencia de los colonizadores e inmigrantes europeos estas regiones adoptaron las prácticas del Viejo Mundo y las desarrollaron en sus terruños. La mayoría de los países del Nuevo Mundo que elaboran vino iniciaron esta actividad en los últimos 100 años y se vieron beneficiados por los avances de la agricultura moderna, como por ejemplo, los sistemas de riego industrial y las cosechadoras mecánicas.

¿Qué países del Viejo Mundo son productores de vino?

Los principales países productores del Viejo Mundo son Italia, Francia, España, Portugal, Austria, Alemania, Grecia, Israel, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia, Croacia, Chipre, Suiza, Inglaterra y Macedonia.

El estilo de los vinos del Viejo Mundo se basa en las prácticas tradicionales de elaboración que se han transmitido de generación en generación. Tal es así, que muchas de estas prácticas están reguladas por normativas y leyes estrictas para preservar la autenticidad de los ejemplares de cada región.

Diferencias entre los vinos del Nuevo y Viejo Mundo

En líneas generales, los vinos del Nuevo Mundo se originan en regiones vitivinícolas más cálidas, por lo tanto, sus vinos son más voluptuosos, potentes y concentrados; con un grado más alto de alcohol, baja acidez, y aromas y sabores pronunciados. 

En cambio, los vinos del Viejo Mundo nacen en regiones vitivinícolas más frías, con lo cual sus ejemplares son ligeros en aromas, de acidez muy marcada y con una graduación alcohólica siempre menor a los 14°. 

Otra de las grandes diferencias entre unos y otros es que mientras que en los vinos del Viejo Mundo la impronta del vino se centra en el terruño (o microterruño) en el que se cultiva la vid; en los del Nuevo Mundo la identidad está dada en gran medida por su varietalidad. Por lo tanto, mientras que en unas etiquetas se destaca el cepaje, en las otras se resalta el terroir de origen. 

Sin embargo, en las últimas décadas el concepto de terruño también cobró mucha relevancia en los vinos del Nuevo Mundo, como en el caso de aquellos elaborados en la Argentina.

Características de los vinos del Viejo Mundo

  • Aromas y sabores más delicados y elegantes
  • Menos frutales
  • Menor contenido alcohólico
  • Mayor acidez 
  • Elaborados siguiendo las reglas tradicionales de la región productora
  • Más tradición, historia y legado familiar
  • Etiquetas enfocadas en el terruño 

Características de los vinos del Nuevo Mundo

  • Aromas y sabores más pronunciados y voluptuosos
  • Más frutales
  • Mayor contenido alcohólico
  • Niveles medios o bajos de acidez
  • Elaborados con técnicas de producción modernas
  • Más tecnología y ciencia, menos tradición familiar
  • Etiquetas enfocadas en la variedad de uva

¿Cuáles son sus similitudes?

Si bien los vinos del Viejo y el Nuevo Mundo guardan muchas diferencias entre sí en cuanto a su historia, su elaboración, sus terruños y sus características, lo cierto es que actualmente el Nuevo Mundo se está asemejando mucho más a su antecesor. 

El Nuevo Mundo vitivinícola nació bajo la influencia de Europa, sin embargo, no fue hasta hace algunas décadas que algunos de las concepciones típicas de la vitivinicultura europea se instalaron en países como la Argentina. Algunas de estas tendencias son el auge de los vinos de terruño y la predominancia de los rosados secos por sobre los dulces, entre otras.  

¿Qué maridajes se recomiendan para cada tipo de vino?

Como hemos visto, el universo de los maridajes es muy amplio y ofrece un sinfín de posibilidades en las que siempre debemos privilegiar el gusto personal. Por lo tanto, es muy difícil sugerir acuerdos para los vinos del Nuevo y el Viejo Mundo, ya que en el interior de estas categorías conviven ejemplares muy diferentes entre sí. 

Sin embargo, una muy buena alternativa para realzar el sabor de platos y comidas es inclinarse por los maridajes regionales; como por ejemplo, un Malbec salteño con empanadas de carne, un Cabernet Sauvignon mendocino con un asado a la cruz, un Sauternes con foie gras o un Sangiovese con parmigiana di melanzane (berenjenas a la parmesana), entre muchas otras combinaciones.